domingo, 8 de junio de 2008

Purgatorio en Tokyo


Hola a todos. Hoy al mirar levemente las noticias de Antena 3 he visto una noticia bastante poco habitual. Parece ser que una persona en Tokyo entró con su coche a gran velocidad en una zona peatonal arrollando a varios viandantes. Después de estrellarse, se bajó del coche y atacó con un cuchillo a todos los que estaban a su alcance. Cuando fue detenido por la policía y le preguntaron porqué lo había hecho, el dijo que estaba cansado del mundo.




No puedo más que pensar en cómo es posible que este tipo de personas desperdicien su furia de esta manera. En vez de lanzarse a por personas inocentes, podría haberse marcado un objetivo mas útil para la sociedad. Podría haber ido a algún barrio bajo o suburbio y buscar a la escoria social. Matones, camellos, ladrones, sólo hay que echar un vistazo, más en una ciudad tan grande como Tokyo. Podría haber hecho una auténtica limpieza al estilo "Taxi driver" (muy buena película de Robert De Niro).




Y sin embargo, ahí está, irá a la cárcel sin siquiera haber hecho algo positivo por la sociedad. Sin embargo, también podemos pensar que no tendría muchas ganas de hacerle favores a una sociedad de la cual está más que cansado.




En cualquier caso, sigo sin entenderlo. Seguro que aún cansado de la sociedad, estaría mejor cansado en su casa que en una prisión. Supongo que lo que le importaba era llamar la atención, que todo el país y parte del mundo supiera que él está cansado del mundo. Desde luego, si eso era lo que quería, lo ha conseguido.




Tal y como va la cosa con la criminalidad y los problemas económicos, no me extrañaría que esto se repitiera más de una vez.




Un saludo.

1 comentario:

Luis dijo...

Yo creo que se trata de condescendencía y compasión. Si me pusiera en la piel del tipo este, y creyera que el mundo fuera un asco, pensaría que los que tienen la culpa son los que tinen algún tipo de papel en esta sociedad, algo de voz. Los marginados, por definición, no están representados en el poder: ni pinchan ni cortan, y no supondrían una pérdida.

De hecho, si me pusiera extremista podría pensar que los marginados, son pruebas vivientes de los fallos del sistema capitalista, y de alguna forma ejercen un tipo de fuerza "underground" contra él.

Sin duda, como loco psicótico sin aspiraciones y "cansado" del mundo optaría por eliminar a aquel que formara parte integrada de esa sociedad que no me representa. Y, si fuera más allá, pensaría que el pensamiento contrario, cargarme a todo desarraigado social sería una idea del deber implícita de la sociedad (como el suicidio), lo que me llevaría a odiar más al sistema.

Esto da para un poco más, pero con el ladrillo de arriba hay suficiente.