Hola a todos. Hoy me apetece denunciar la simpleza de la televisión en ciertos aspectos, así como de su audiencia. Os pondré una serie de ejemplos que se me van ocurriendo mientras escribo.
Por ejemplo, anoche mismo en OT. ¿Os habéis fijado (los que lo veáis) que el público siempre hace lo que Risto diga que debe hacerse? Si dice que tal debe salir, sale. Si tal debe quedarse, se queda. Lo más gracioso de todo es que Risto más de una vez ha apuntado algunos defectos de la audiencia (falta de criterio, falta de gusto, poca constancia, etc.) y sin embargo, ésta sigue teniéndole por una especie de Dios. En estos momentos, siempre me pregunto si los pobres borregos han entendido que les están insultando. Supongo que no, ellos son felices creyendo que se lo dice a "otros". Así, todos creen que no les hablan a ellos.
Otro ejemplo interesante es la serie de Bea. En un principio era en cierto modo bonito pensar que una chica que no fuera 90 - 60 - 90 pudiera enamorar a alguien (y no precisamente a un palurdo cualquiera). Sin embargo, tarde o temprano tenía que llegar el momento. Ahora Bea se convertirá. Pasará de ser la chica pura que atraía con su personalidad y encanto, a ser otro escultural cuerpo más que usa el sexo y la libido masculina a favor suyo. Seguramente pasará a perder cerebro (para ganar tetas) y se convertirá en otra tontita más que cree que no necesita inteligencia mientras tenga su cuerpo. Aunque claro, cuando envejezca y el cuerpo ya no esté para seducir a nadie, se tendrá que casar con algún triste señor (el último que logre encontrar), limpiarle la casa, plancharle la ropa y hacerle la cena. Todo por no haberse apostado por la inteligencia antes que por el aspecto. Por supuesto, no es culpa de Bea, si no de estos guionistas que tenemos aquí, tan "imaginativos" y "originales" cuando hacen las historias.
Y hablando de la creatividad de los guionistas, es curiosa la sensación que tengo en cierta serie. Todos hemos tenido alguna vez la sensación del Deja Vu (creemos que sabemos lo que va a pasar en el próximo instante). Sin embargo, con "El sindrome de Ulises", yo me siento más bien como un auténtico profeta. A veces, mientras ceno, la serie está puesta en la televisión. Entonces, tontamente me pongo a mirar. En cada escena pienso: "¿a que ahora sucede esto?". Y sucede, tal cual me lo había imaginado. No puedo ni pensar en cuan tonto debes ser para que esta serie logre sorprenderte en algo. Hay veces que incluso he logrado predecir como acabará desde los primeros cinco minutos. Eso sí, mientras se emite, si no me equivoco, es casi el programa que más audiencia obtiene. Hay que ver de qué manera han perdido las personas el sentido del gusto. Normalmente se acusa a los guionistas de ofender la inteligencia del público, aunque en este caso, es el propio público el que se ofende a sí mismo viendo tal basura.
Bueno, no se me ocurren muchos más ejemplos así que lo dejo aquí por hoy. Sin embargo, tranquilos, la televisión actual ofrece una gran abundancia de programas basura perfectos para ser carne de cañón de mi blog. Ya iré poniendo más cosas cuando las vea.
Un saludo.
2 comentarios:
Aish, y que lo digas.
Me has quitado la idea del post de hoy ¬¬ estoy perdiendo facultades xD
En fin, si quieres seguir poniendo ejemplos tiene la que se avecina, copia clavadita de aquí no hay quien viva, también tienes todos los programas del corazón, las telenovelas tan absurdamente repetitivas (las de la guerra esas de las abuelicas no, las otras, las de santiago-cristóbal-menéndes(cons, no con z)-rodrígues-por-la-grasia-de-Dios-santo-y-bendito, ejemplo de nombre telenovelero típico).
Un besote!
Absolutamente de acuerdo con la tv basura(esto ha dejado de ser un simple calificativo de la palabra tv para formar una parte inseparable de ella). De hecho yo ni la veo (excepto los domingos para ver Camera café y Aida, me encantan), prefiero gastar mi tiempo en otras actividades, como por ejemplo entrar en éste, tu blog.
La primera y última vez que te soy pelota, que lo sepas.
Ale,
DaCoX
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